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Sostenibilidad del atún en el Océano Pacífico Oriental
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Visión de la región. Aplicación del Código de Conducta

Ponencia 2

Roberto De Andrade, FAO

Detectadas las necesidades de reforzar las medidas y las políticas para una pesca responsable, se elabora El Código de Conducta de la FAO, tema que lo expone Roberto de Andrade, funcionario de esta organización.

Iniciando su disertación, presenta algunos puntos a ser tratados en el transcurso de la misma, como son: El Contexto del Código de Conducta; Objetivos, Principios e Implementación; Gestión de la Pesca Responsable y Sostenibilidad, y Observaciones Finales.

Manifiesta que el Código de Conducta de Pesca Responsable fue elaborado en 1992, y se plasma en el año de 1995, aprobado por el Consejo de Pesca de la FAO, el COFI. El documento es un instrumento voluntario que ha tenido que ser sostenido en una serie de instrumentos vinculantes, por citar uno de ellos, la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, 1982 (UNCLOS); y no vinculantes, como el Código de Conducta de la FAO, instrumentos que para darle coherencia y su aplicación, posteriormente van surgiendo una serie de otros elementos.

En ese camino de la aplicación del código, manifiesta que la FAO hace un esfuerzo y publica otros documentos que sostiene las ideas plasmadas en el Código de Conducta y refiere que en la última reunión de Rio + 20 surge la necesidad de tener una actuación más firme principalmente en temas de pesca; y, de poder trabajar específicamente en el Proyecto GEF, en el caso del atún con todas las organizaciones regionales de la pesca.

Indica que el Código está dirigido a todos los interesados de la pesca y la acuicultura: los Estados, las entidades pesqueras, las organizaciones internacionales (incluidas las organizaciones  intergubernamentales y las organizaciones no gubernamentales), entidades que participan en la gestión, la conservación, el comercio y la utilización de los recursos pesqueros.

Hizo énfasis en manifestar, que fue muy grato saber que CEIPA ya está trabajando con un Código de Conducta propio, para justamente tener una sostenibilidad de la pesca del atún, en el Pacífico Oriental. Si se observa el gráfico anterior de la producción mundial, se detecta una necesidad, debido a que la pesquería del atún ha llegado a un punto en que la curva de crecimiento se estabiliza, a partir del 2000.

Igual situación se presenta en los dos siguientes gráficos a la derecha, que indican la producción del Atún en Latinoamérica y en Ecuador.

OBJETIVOS DEL CÓDIGO

Establecer los principios y normas internacionales de conducta para las prácticas responsables, con el debido respeto del ecosistema y la biodiversidad, y reconocer la importancia nutricional, económica, social, ambiental y cultural de la pesca y los intereses de todos los interesados en el sector pesquero.

Proporcionar un marco de referencia para las actividades nacionales e internacionales, incluida la formulación de políticas y otros marcos e instrumentos jurídicos e institucionales, para garantizar la explotación sostenible de los recursos acuáticos vivos en armonía con el medio ambiente.

Promover la contribución de la pesca a la seguridad alimentaria y la calidad de los alimentos, el comercio responsable de pescado y productos pesqueros, la investigación en materia de pesca, los ecosistemas y los factores ambientales, la protección de los recursos acuáticos vivos y su medio ambiente, la cooperación en la conservación de los recursos pesqueros y la gestión de la pesca y el desarrollo.

PRINCIPIOS DEL CÓDIGO

“El derecho a pescar lleva consigo la obligación de hacerlo de forma responsable a fin de asegurar la conservación y la gestión efectiva de los recursos acuáticos vivos”

Sobre la base de un conjunto de principios generales definidos (artículo 6) del Código establece principios y normas detalladas para la pesca; y, las directrices sobre las mejores prácticas en seis artículos distintos (artículos 7-12): Gestión de pesca, Operaciones Pesqueras, Desarrollo de la Acuicultura, Integración de la Pesca en la Ordenación de las Zonas Costeras, Prácticas Pos cosecha y Comercio e Investigación Pesquera, trabajo conjunto entre el sector público y privado.

La aplicación del código se viene dando en varios países, la reciente Ley de Pesca de Chile incorpora una serie de elemento que está en el Código de Conducta de Pesca Responsable. Además, se ha visto como en Ecuador se viene aplicando el Código de forma firme, lo que nos da una sostenibilidad que es lo que se busca en tema de pesca y sobre todo de pesca de atún, materia de este Foro.

RESPONSABILIDAD DE LA APLICACIÓN DEL CÓDIGO

La aplicación, es responsabilidad de los estados, la FAO genera el Código y da asistencia técnica para que sea incorporado, el desarrollo tiene que ser tutela de los estados. Por lo que hoy se está dando una visión y orientación por los cinco objetivos estratégicos, que tienen dos objetivos transversales que son, género y gobernanza.

Manifiesta que en Ecuador, CEIPA es una Institución que da gobernanza a una actividad pesquera, como es el caso del atún en el Ecuador. La FAO para supervisar el progreso global de la aplicación del Código y los instrumentos conexos utiliza un cuestionario de autoevaluación cada dos años. La gestión de la pesca responsable y su sostenibilidad garantiza la conservación a largo plazo y su sostenibilidad de los recursos pesqueros. El mantenimiento de su calidad, diversidad y disponibilidad para las generaciones presentes y futuras. La gente y el recurso son fundamentales para el desarrollo de una industria que bajo responsabilidad social se va consolidando.

En cuanto a las consideraciones generales para la gestión de la pesca, hace referencia a consideraciones ecológicas y biológicas (cambios dinámicos), características de los recursos, limitaciones ambientales, capacidad de flota y esfuerzos pesqueros, dimensiones económica y social, conceptos y funciones institucionales, participación de los interesados, escala de tiempos y enfoques precautorios (Ver gráfico anterior).

OBSERVACIONES FINALES EN SU PONENCIA

A casi 20 años de su aprobación, el Código de Conducta para la Pesca Responsable de la FAO es el documento más consultado y sigue siendo la referencia clave para el logro de la pesca sostenible.

Aunque el Código es un instrumento voluntario, se han tomado las disposiciones en las políticas y los marcos legislativos de varias organizaciones internacionales, las organizaciones regionales de ordenación pesquera y los Estados.

La aplicación efectiva del Código y los instrumentos conexos de todos los actores de la pesca y la acuicultura se traduce en garantizar suministros adecuados de pescado y productos pesqueros para las generaciones presentes y futuras, así como las oportunidades de generación de ingresos sostenidos.

Hay una necesidad urgente de intensificar acciones de seguimiento para combatir la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR), que socava seriamente los esfuerzos encaminados a lograr una pesca sostenible, priva a muchos países de un recurso natural fundamental y sigue siendo una amenaza persistente para el desarrollo sostenible.

Debe darse asistencia adicional a los países en desarrollo que refuercen su capacidad nacional para desarrollar de manera sostenible, administrar, regular y controlar sus pesquerías y para mejorar el acceso al mercado para sus productos de la pesca.