La Comisión Europea ha realizado la primera asignación de contingentes arancelarios autónomos (ATQ) para productos pesqueros, revelando un agotamiento crítico en el sector de lomos de atún que impactará significativamente a la industria.
Según Anfaco-Cecopesca, el agotamiento de estos contingentes obligará a las fábricas europeas a pagar un arancel del 8,04%, lo que podría suponer más de 20 millones de euros en impuestos. La asociación solicita un incremento del contingente hasta las 55 mil toneladas para mantener la competitividad del sector.
“Los contingentes autónomos son una herramienta fundamental para asegurar el acceso a los recursos pesqueros”, señala Roberto Alonso, secretario general de Anfaco-Cecopesca, quien advierte que este agotamiento de los ATQ afecta directamente a los consumidores europeos, reduciendo la oferta competitiva de productos pesqueros.
Entre otros productos afectados destaca el gambón argentino, con un 37,80% de utilización en la primera asignación, que se prevé agotar en el primer trimestre. Este contingente fue previamente duplicado hasta las 16.000 toneladas gracias a la cooperación entre Anfaco-Cecopesca y la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras.
La Comisión Europea ha iniciado un proceso de evaluación de impacto del régimen ATQ, con una consulta pública prevista para el primer trimestre. Anfaco-Cecopesca y otras entidades europeas expresan preocupación por este proceso, considerándolo “sin un objetivo claro y heredado del Pacto Verde”.
La industria conservadora española, que exporta el 90% de su producción a la Unión Europea, enfrenta una fuerte competencia de terceros países, que representan más del 50% del mercado de conservas, lo que subraya la importancia de mantener un sistema de contingentes arancelarios efectivo.