Tras la primera asignación de los contingentes arancelarios autónomos otorgados por la Comunidad Europea, Anfaco-Cecopesca lamentó que la cantidad asignada a lomos de atún resultase insuficiente y se agotase, lo que obliga a las fábricas a pagar un 8,04 % de arancel, encareciendo el proceso y comprometiendo el precio de las conservas. Por ello, insistió en la necesidad de incrementar la cantidad para este producto hasta las 55.000 toneladas.

El presidente de la Cámara Nacional de Pesquería (CNP) de Ecuador, Bruno Leone, calificó esta solicitud como “inaceptable” e instó a eliminar el mecanismo de contingentes en la Comunidad Europea. Según sus declaraciones a Azul Sostenible, la demanda de la patronal conservera española podría permitir la entrada al mercado europeo de productos provenientes de flotas que no cumplen estándares reconocidos de sostenibilidad ambiental como el sello MSC, no garantizan condiciones laborales aceptables y reciben fuertes subsidios de sus gobiernos.

Leone enfatizó que frecuentemente se reportan casos de esclavitud en estas flotas. En contraste, se destacaron los esfuerzos de los armadores de la flota atunera de Ecuador, realizando grandes inversiones para mejorar sus estándares ambientales, proteger la biodiversidad marina y garantizar un régimen laboral digno.

Permitir la entrada de productos provenientes de flotas que no cumplen con estos estándares perjudica el acuerdo al que se ha llegado con Ecuador, que “ha venido cumpliendo a cabalidad”. El presidente de la Cámara Nacional de Pesquería reiteró que el país sudamericano se ha consolidado como un referente en pesca sostenible gracias a la cooperación entre el gobierno ecuatoriano y las organizaciones regionales de pesca.

Leone advirtió que permitir el ingreso de productos que no cumplen con estos criterios ni con el acuerdo comercial bilateral vigente no solo desincentivaría los esfuerzos de los armadores e industrias que han apostado por la sostenibilidad y el cumplimiento de normativas internacionales, sino que también “enviaría un mensaje contradictorio a los mercados internacionales” respecto al valor del comercio responsable.