El gobierno ecuatoriano presentó la Estrategia Nacional de Economía Circular (ENEC) en un evento realizado en Quito. Este ambicioso plan busca reorientar el modelo de desarrollo del país y del sector productivo hacia prácticas más sostenibles, desligando el crecimiento económico del uso excesivo de recursos naturales.

La ministra de Producción Comercio Exterior Inversiones y Pesca, Sonsoles García, destacó la importancia de la ENEC para mejorar la competitividad del país en el escenario global. “Con esta estrategia, las empresas ecuatorianas podrán acceder a nuevos mercados y adaptarse a las normativas internacionales”, afirmó García, subrayando que la sostenibilidad y la competitividad son pilares complementarios para el desarrollo productivo de Ecuador.

La Estrategia Nacional de Economía Circular se basa en tres principios:

  1. Preservar y aumentar el capital natural, controlando el uso de recursos finitos y equilibrando el aprovechamiento de recursos renovables.
  2. Optimizar el rendimiento de los recursos, manteniendo los productos, componentes y
    materiales en uso en su nivel más alto de utilidad en todo momento.
  3. Fomentar la eficacia del sistema, minimizando las externalidades negativas mediante el diseño para evitar la generación de residuos y contaminación.

Por su parte, María Cristina Recalde, viceministra de Ambiente, Agua y Transición Ecológica destacó que esta iniciativa es una respuesta contundente a los desafíos ambientales y contribuye significativamente al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible por parte de Ecuador.

La ENEC está enfocada en cinco ejes estratégicos fundamentales: Política Pública, Cooperación y Financiamiento, Producción y Consumo Sostenible, Innovación e Investigación, y Ciudades Circulares y Desarrollo Territorial Sostenible. Estos pilares servirán como hoja de ruta para implementar el modelo de economía circular en todo el país, abarcando diversos sectores y actores clave.

El plan nacional tiene un alcance que cubre todo el territorio ecuatoriano y se implementará durante una década, desde 2025 hasta 2035. Al término de este período, se llevará a cabo una evaluación de los logros alcanzados y se establecerán nuevos objetivos.

Un aspecto destacado de la ENEC es su enfoque en apoyar al sector empresarial en su transición hacia modelos de producción más sostenibles. La estrategia promueve la optimización de recursos, fomenta la innovación tecnológica y facilita el acceso a financiamiento para proyectos con enfoque ambiental, respondiendo así a las necesidades concretas de las empresas locales.