La organización ambientalista Oceana ha pedido a la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) de Estados Unidos que siga el ejemplo del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y amplíe su Programa de Monitoreo de Importaciones de Productos del Mar (SIMP), para cubrir todas las importaciones de mariscos que ingresan al país, luego de que la DHS incluyera a la procesadora china de productos del mar Shandong Meijia Group a la lista de empresas sin acceso al mercado estadounidense en base a la Ley de Prevención del Trabajo Forzado. Además la DHS también incluyó en esta lista a una empresa de aluminio y otra de fabricación de calzado, las tres empresas tienen sede en Xinjiang.

Actualmente, el SIMP sólo monitorea las importaciones procedentes de una lista de 13 especies consideradas de alto riesgo por su conexión con la pesca ilegal, no reglamentada y no reportada (INDNR). Sin embargo, Oceana argumenta que esta cobertura limitada deja importantes lagunas que permiten el ingreso de capturas ilegales y de embarcaciones con bandera china que permiten el trabajo forzoso. 

“Los esfuerzos de la NOAA para combatir la pesca ilegal son insuficientes, mientras sólo monitoreen unas pocas especies”, declaró Beth Lowell, vicepresidenta senior de Oceana. “La pesca INDNR es un crimen que ocurre en todas las pesquerías, por lo que necesitamos un monitoreo integral para detenerla”.

La organización señala que el DHS recientemente expandió sus requisitos de monitoreo para las importaciones a todos los productos marinos, independientemente de la especie. Oceana insta a la NOAA a adoptar una política similar mediante una revisión integral de su programa SIMP.

“Es completamente inaceptable que productos del mar producidos mediante trabajo forzado ingresen a nuestras fronteras, por lo que es alentador ver que el DHS dé este importante paso”, manifestó Max Valentine, director de la Campaña de Transparencia y Pesca Ilegal de Oceana.

Por su parte, algunos representantes de la industria pesquera han expresado preocupación por la potencial carga adicional que una expansión del SIMP podría imponer, aunque la mayoría respalda los esfuerzos para erradicar las prácticas ilegales que dañan el sector.

Se espera que la NOAA anuncie su decisión sobre una revisión del SIMP en las próximas semanas, en medio de la creciente presión de grupos ambientalistas y algunas naciones aliadas para fortalecer las medidas contra la pesca ilegal en aguas estadounidenses e internacionales.

Foto: John Holmes / Oceana